Decálogo es una de las leyes básicas que aún hoy nos guían Cristianos. Es un conjunto de principios morales que hay que seguir en todos los ámbitos de nuestra vida. Decálogo se grabó en El libro del Éxodo (Segundo Libro de Moisés).

Según el mensaje bíblico, Dios Yahvé dictó los Diez Mandamientos a Moisés en la montaña Sinaímientras se hace senderismo Israelitas a Canaán desde Egipto. En cuanto a Moisés responsable de escribir las palabras de Dios, es él mismo Dios originalmente grabó los mandamientos en tablas de piedra.

Sin embargo, el texto de los mandamientos tuvo que ser grabado de nuevo en las tablas, porque las primeras habían sido rotas por Moisés de ira cuando vio que la gente adoraba el becerro de oro en su ausencia. A la segunda vez, es la misma Moisés hizo dos tablas de piedra.

Actualmente en Iglesia Católica, el texto del Decálogo se presenta en la llamada versión catequética.

¿Qué ordena Dios en el octavo mandamiento del decálogo?

8º mandamiento según la versión catequética se lee: "8. No des falso testimonio contra tu prójimo" y se refiere a los principios de nuestra propia moral hacia el prójimo, hacia la otra persona. Es importante recordar la importancia de tratar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

En este mandamiento el Señor Dios Nos pide que no calumniemos a nuestro prójimo bajo ninguna circunstancia a los ojos de otras personas. No debemos hacer malos juicios u opiniones sobre una persona, pero también debemos cuidar que las palabras que dirigimos al prójimo sean sinceras y verdaderas.
En resumen: 8º mandamiento prohíbe calumniar a otra persona a los ojos de los demás y prohíbe la mentira y la hipocresía en general.

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