Algunos creen que es así, mientras que otros sostienen que la postura que se adopte durante la oración es irrelevante. Biblia no menciona esta cuestión, ni nos dice si debemos rezar en una posición determinada o movernos mientras rezamos. Si tienes dudas sobre esta práctica, lo mejor es que consultes a un líder religioso.

Un día, una mujer muy religiosa se me acercó y me mostró un versículo de la Biblia que dice que es un pecado si no se reza de rodillas. Señalé que Jesús Rezó durante la mitad de su vida, sentado frente a sus discípulos.

Los antiguos sabios (rabinos) afirmaban que "rezar tumbado es como ser sonámbulo". Este tipo de oración no es recomendable porque durante la oración todo el cuerpo debe estar inmóvil y en un solo lugar, lo que incluye los ojos. La oración requiere concentración y enfoque. Cuando nuestro cuerpo está relajado durante la oración, tendemos a dejarnos llevar por dormir. Además, algunas personas pueden encontrar difícil o incómodo rezar en esta posición con la cabeza inclinada hacia el pecho. Y como se ha demostrado que el sueño tiene un efecto perjudicial en la claridad de pensamiento y el desarrollo espiritual de una persona, las oraciones compuestas en este estado también carecerían de estas importantes cualidades.