Fiscalidad de la Iglesia es un tema bastante común en el debate público. Por un lado, es lógico que una institución eclesiástica no influya en el Estado, ni éste se inmiscuya en la vida interna de los fieles. Sin embargo, lo que historia con el dinero que los fieles gastan en Iglesia? Es importante comenzar con el hecho de que todas las asociaciones religiosas, están exentas de llevar registros fiscales. Por lo tanto, no se sabe exactamente cuánto dinero entra y sale de las instituciones eclesiásticas. El dinero que se recauda durante cualquier tipo de misa o servicio obviamente no va a parar a los bolsillos de los sacerdotes.

Tampoco se registra externamente de ninguna manera. Por lo tanto, es lógico que sean dineroque no están sujetos a impuestos. Se utilizan para el mantenimiento de los edificios de la iglesia, los gastos propios y los fines benéficos.

Dichos ingresos dependen principalmente del tamaño de la parroquia y del número de fieles. Este dinero debe considerarse como un dinero que los fieles utilizan para apoyar a su comunidad, se da voluntariamente. Desde el punto de vista legal, esto debe considerarse como una especie de deducción fiscal. Los fieles también pueden hacer donaciones a la Iglesia. Se anima a los fieles a hacer donaciones a través de las desgravaciones del impuesto sobre la renta que el Estado concede a las personas que desean hacer este tipo de donaciones. El límite de la desgravación fiscal es el 6% de los ingresos anuales del contribuyente. Esto se conoce como una donación con fines de culto

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