Santo Tomás de Aquino vivió de 1225 a 1274 y está considerado como uno de los más grandes filósofos de su tiempo. Pertenecía a la orden de los dominicos. Sus obras teológicas y sus reflexiones sobre la naturaleza del mundo tuvieron una influencia muy fuerte en el cristianismo. Santo Tomás es uno de los doctores de la Iglesia Católica. Fue canonizado en 1323 por el Papa Juan XXII. Entre las obras más populares de Tomás de Aquino se encuentran la "Suma contra Gentiles" y la "Suma Teológica".

Santo Tomás separó el conocimiento de la fe. Creía que el hombre no es capaz de comprender todas las verdades de la fe con su razón. Somos capaces de llegar a algunos de ellos utilizando únicamente nuestros sentidos y nuestra atención. Sin embargo, presentó pruebas racionales para existencia Dios. Una de ellas es el orden y la armonía de la naturaleza. Tomás de Aquino opinaba que debe haber una causa detrás de la existencia del movimiento; en este caso, la existencia de un poder superior en forma de Dios. Afirmó que todas las criaturas tienen alma, pero el hombre es el ser más importante después de Dios, porque es el único que puede pensar.

En su mayor parte, las ideas de Santo Tomás sobre el mundo y la fe siguen siendo pertinentes. Sin embargo, hay algunas tesis y puntos de vista en sus obras cuya proclamación hoy parece muy excéntrica e hiriente para muchas personas. Uno de estos temas es la actitud de Santo Tomás hacia las mujeres. Es autor de estas citas, entre otras:

Un embrión masculino se convierte en un ser humano al cabo de 40 días, un embrión femenino al cabo de 80. Las niñas se forman a partir de espermatozoides dañados o como resultado de vientos húmedos.

El valor de una mujer reside en su capacidad reproductiva y en su capacidad de ser utilizada para el trabajo doméstico.

Las mujeres son un error de la naturaleza... con su exceso de humedad, su temperatura corporal indicativa de una minusvalía corporal y espiritual... son una especie de hombre tullido, fallido, fracasado.

No se puede negar que se trata de tesis muy controvertidas que pueden causar angustia a muchas mujeres. Santo Tomás pone a la mujer en el papel de un ser más débil que no está predispuesto a la existencia independiente. Necesita un hombre que la cuide. Las mujeres están destinadas a la reproducción y al cuidado del hogar. Según algunos teólogos, al escribir así sobre la mujer, Santo Tomás socava la perfección y la infalibilidad de Dios, que creó al hombre a su imagen y semejanza.